Unas 200 personas protestan contra la ordenanza de regulación del tráfico de Lerma

La manifestación ha comenzado en el arco de la cárcel y ha finalizado en el ayuntamiento

Los manifestantes suben por la Calle Mayor con una pancarta al frente. Fotos: Héctor Gómez

Instantes antes de comenzar las protestas, en el arco de la cárcel

A las doce en punto del mediodía de hoy se indicaba la manifestación convocada por la Asociación de Empresarios y Comerciantes de Lerma. La protesta la encabezaba una pancarta con el lema «no a la ordenanza reguladora del tráfico; por un pueblo vivo». «Negocios sí, ordenanza no; El ayuntamiento gobierna contra los vecinos; ayuntamiento escucha a tu pueblo; la ordenanza mata a Lerma y la comarca; por un pueblo vivo, todos unidos». Estos eran los mensajes que se podían leer en los carteles portados por algunos manifestantes.

En el centro con chalecos reflectantes, los concejales del PP Javier Angulo y Alfredo Alonso esperando el comienzo de la manifestación

Entre el ruido de los silbatos avanzaba la manifestación por la Calle Mayor a buen ritmo, pasaba por la Plaza Mayor y llegaba a las puertas de la casa consistorial, donde tres personas hemos contabilizado entre 160 y 180 manifestantes (200 según la Subdelegación del Gobierno). Un buen porcentaje de esas personas eran empresarios que tienen ubicados sus negocios en el casco histórico. También los han acompañado otros de diferentes zonas del municipio, así como trabajadores y vecinos.

La manifestación transcurriendo por la Plaza Mayor

A su llegada a la puerta del consistorio, la presidenta de ASEMYCO Ana Carmen Ortega y un comerciante han leído un manifiesto exponiendo los motivos por los que rechazan la ordenanza de regulación del tráfico en el casco histórico de Lerma. En su lectura han expuesto que ASEMYCO representa prácticamente a «la totalidad del tejido económico en que se basa la villa de Lerma», y que sostienen «directa o indirectamente la mayor parte de los empleos del pueblo».

Imagen de la Calle Audiencia, donde se leyó el manifiesto a las puertas del ayuntamiento (1)

El manifiesto lamenta la falta de diálogo, la falta de gestión para tomar medidas previas, el insuficiente aparcamiento alternativo, la pérdida de valor de las edificaciones del casco histórico y que no se ha valorado el daño económico y social de esta ordenanza. Continuaron leyendo que en Lerma hay zonas de «mayor peligrosidad demostrada», como la zona de los mesones y la travesía, pero que no se contemplan estudios ni medidas para atajar esos problemas. Tampoco se han olvidado de los vecinos de la comarca, indicando que también consumen en sus establecimientos y que acuden a Lerma a realizar muchos trámites con la administración. En el manifiesto han llamado a la reflexión sobre «el alcance y las consecuencias que va a tener la implantación de esta ordenanza», asegurando que es fruto de una ocurrencia, una opinión o gusto personal, y que no puede ser objeto de un experimento. Finalizaban la lectura manifestando que no solo defienden «los intereses de los asociados, sino de todos los lermeños en general», e insistiendo en que esta ordenanza sea retirada.

Imagen de la Calle Audiencia, donde se leyó el manifiesto a las puertas del ayuntamiento (2)

Los manifestantes acabaron las protestas en la puerta del Palacio Ducal, donde uno de los participantes retiró los carteles de protesta al resto, indicándoles que el Parador no tiene ninguna culpa de esta situación. En ese momento, 45 minutos después del comienzo, los manifestantes comenzaron a disolverse, finalizando unas protestas en las que no ha habido ningún incidente destacable.

Aspecto que presentaba la Calle Audiencia desde la Plaza Mayor justo después de leer el manifiesto

Gran parte de los establecimientos del casco antiguo no han abierto la persiana durante la jornada de hoy, aunque algunos de la Calle Mayor y de otras zonas de Lerma sí que han atendido al público con normalidad. La presidenta de ASEMYCO, en declaraciones a los medios de comunicación, explica que la manifestación de hoy junto con el paro patronal de prácticamente «todos los negocios del casco histórico es algo inédito en Lerma». Ortega también expone que «Lerma tiene un hándicap», ya que no solo viven de los vecinos de Lerma, sino también de los de la comarca y del turismo. «Ese turista que pasa, que va de viaje y para en Lerma, y come en Lerma y compra en Lerma. Tiene una serie de características que no son las de cualquier otro municipio. […] Si esto va a pleno definitivo pues tomaremos medidas judiciales», sentenciaba Ortega.

Las protestas finalizaron frente al Parador

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